sábado, 12 de marzo de 2011

Los orígenes del tango

Algunos años antes del 1900 la ciudad de Buenos Aires estaba devastada por la fiebre amarilla. Los más pudientes abandonaron el centro porteño, epicentro de la enfermedad, y se asentaron en la zona norte (hoy Retiro, Recoleta, Olivos, Vicente Lopez). Al mismo tiempo, un nutrido grupo de inmigrantes italianos, españoles, alemanes y otros huían de sus tierras escapando del hambre y la miseria. A medida que bajaban de los barcos iban ocupando los ruinosos caserones vecinos al puerto (hoy San Telmo, Barracas, Pompeya, La Boca) Obviamente que una casa no era habitada por una sola familia sino por varias, incluso de distintas nacionalidades, así nacieron los conventillos.

En los patios de esos conventillos nació el tango, hablando del destierro y del exilio al principio y de sexo después. La mezcla del bandoneón alemán mas las armonías de las canzonetas napolitanas, las melodías genovesas y vascas con los ritmos de origen cubanos y africanos traídos por los negros que ya habitaban la ciudad hicieron nacer primero la música, luego la danza y por último la poesía.
El tango siempre estuvo ligado al sexo ya que en éstas zonas existían muchos burdeles y pulperías. Hagamos un repaso de los primeros títulos que se cantaron: Empujá que se va a abrir, Echale aceite a la manija, Va Celina en punta, Afeitate el siete que el ocho es fiesta, Dejalo morir adentro, Date vuelta, Pan dulce, Hacele el rulo a la vieja .....y para que seguir.
Condenado por la iglesia y prohibido por la policía por incitar el escándalo, fue asociado con la lujuria y la diversión "non sancta" junto a la bebida y el baile. Como la prostitución también estaba prohibida se crearon casas de bailes como pantalla de los prostíbulos, fomentando el acercamiento entre los cuerpos masculinos y femeninos. En las salas de espera de esas casas siempre había un piano u organillo y ésto terminó por darle impulso a un género que tomó para sus letras material del lenguaje prostibulario: mina, madama, fiolo, cafiolo, cafishio, etc..

Estas primeras letras muestran el estrechísimo vínculo que existió entre el tango y la sexualidad, sus pasos y movimientos así lo siguen demostrando hasta el día de hoy!!!

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